En el vibrante escenario de nuestra fraternidad de danza de tobas, la voz de quienes nos rodean cobra un significado especial. Nuestra sección de testimonios es más que un conjunto de palabras; es un reflejo fiel de las emociones, experiencias y el impacto que nuestras actuaciones dejan en quienes las presencian. Desde los miembros más entregados hasta los espectadores más cautivados, cada testimonio cuenta una historia única, contribuyendo a forjar una narrativa de excelencia y pasión en cada paso que damos.
Un fundador
Como uno de los fundadores de nuestra querido bloque de tobas TUNPA, no puedo evitar sentir un profundo orgullo al reflexionar sobre los últimos 25 años de nuestro viaje. Desde nuestros modestos comienzos hasta convertirnos en un referente nacional e internacional en la escena de las danzas tradicionales, cada paso de este camino ha sido una experiencia inolvidable. Este año, al celebrar nuestro 25 aniversario, es imposible no recordar los momentos que nos han llevado hasta aquí: las risas compartidas durante las prácticas, la emoción palpable en cada actuación y, por supuesto, los logros que hemos alcanzado juntos. Participar en diversos eventos tanto a nivel nacional como internacional ha sido un honor, y cada vez que llevamos la danza de tobas TUNPA a nuevos escenarios, sentimos el poder de nuestra cultura resonando más allá de nuestras fronteras. Que este testimonio sirva como un tributo a todos los miembros, pasados y presentes, que han contribuido a convertir nuestro sueño en una realidad vibrante y llena de vida. ¡Que sigamos bailando con el mismo espíritu durante muchos años más!
Bailarin hace 10 años
Mirando hacia atrás en la última década de mi vida, no puedo evitar sonreír al recordar cada momento que he compartido en la pista de baile con nuestra danza de tobas. Durante los últimos 10 años, este bloque se ha convertido en mucho más que un grupo de compañeros bailarines; ha sido mi segunda familia, mi fuente de inspiración y mi refugio en los momentos más difíciles. Cada práctica, cada actuación y cada festival ha sido una oportunidad para sumergirme en la rica tradición de la danza de tobas TUNPA y para crecer como bailarín y como persona. Celebrar nuestro arte en eventos nacionales e internacionales ha sido un honor, pero lo que más valoro es el vínculo indestructible que hemos forjado entre nosotros a lo largo de los años. Aquí, en este bloque, he encontrado amistades que perdurarán toda la vida y recuerdos que atesoraré para siempre. A medida que continuamos nuestro viaje juntos, estoy emocionado por lo que el futuro nos depara y agradecido por cada momento que he tenido la bendición de vivir como parte de esta increíble familia.
Un nuevo bailarin
Mi primer año como parte del bloque TUNPA de danza de tobas ha sido una experiencia verdaderamente transformadora. Desde el momento en que di el primer paso en el ensayo, supe que había encontrado un lugar donde podía expresarme plenamente y ser parte de algo más grande que yo mismo. Bailar con el bloque durante este último año ha sido una aventura emocionante llena de aprendizaje, camaradería y momentos inolvidables. Cada ensayo me ha desafiado a superar mis límites y a perfeccionar mi técnica, mientras que cada actuación me ha brindado la oportunidad de compartir nuestra cultura y tradición con el mundo. Aunque solo llevo un año en el bloque, ya siento un profundo sentido de conexión y pertenencia con mis compañeros bailarines. Juntos, hemos creado recuerdos que perdurarán toda la vida y hemos forjado amistades que sé que durarán mucho más allá de mi tiempo aquí. A medida que me sumerjo en mi segundo año con el bloque, estoy emocionado por continuar creciendo como bailarín y como persona, y por seguir celebrando nuestra pasión por la danza de tobas TUNPA con esta increíble familia.
Un bailarín hace 20 años
Veinte años de danza con los tobas TUNPA han sido un viaje de autodescubrimiento, pasión y camaradería inquebrantable. Cada paso en las entradas han sido una expresión de mi alma, una conexión con nuestra cultura y una celebración de la hermandad que compartimos. Desde los primeros días hasta este momento, cada actuación ha sido un recordatorio del poder transformador de la danza. A través de los altibajos de la vida, el boque ha sido mi ancla, mi fuente de alegría y mi inspiración constante. Agradezco cada momento compartido, cada aplauso compartido y cada desafío superado. Aquí, en el corazón de los tobas TUNPA, he encontrado un hogar para mi espíritu y un legado de amor por el arte que perdurará por siempre.